Me siento por completo desnuda
Ninguna tela puede taparme
Miro mi cabello que yace muerto sobre mi mano
Se va como el pasado, con recuerdos
Con manos que lo peinaron y lo enredaron
Tijeretazo a tijeretazo, dejo que caiga
Me saco la armadura, saco rejas,
El alambre púa oxidado que rondaban
sobre mis manos heridas
Se deshace corroído por la sal marina
me veo a mi misma en el reflejo de un vidrio que brilla al sol
Veo la que ya soy, en totalidad desnuda.
Acabo de salir de la prisión de la torre,
El encierro se terminó
heme aquí, con mi cabello muerto
que yace sobre el suelo
siento como una brisa me enfría
llamándome a volar, a arriesgar
a dar, a entregarme por completo
libre respirando hondo, no pudiéndolo creer
que al fin me siento a mi misma por entero
teniendo miedo de la alegría que entra y me llena
alimentándome, saciándome.
Cierro los ojos y me imagino sirena dando mí
Cabello como ofrenda para terminar el maleficio
Y para que se vaya con ellos y contigo
pago mi libertad con mi largo cabello
con historia, con caminos, con dolores, con frustraciones
con risas, con amores , con ilusiones.
Hoy para adelante ya no lo necesito
Las manos de un ángel me ayudaron a cortarlo todo
Con el último mechón sobre mi mano, me dice:
“rea por varios años y un día...
se termina tu condena".
Publicado por Veronique Nalatac